“…Porque de la abundancia del corazón habla la boca.” Mateo 12:34
Hola Hijas de un Rey,
Este tema ha estado en mi corazón… y quiero compartirlo con ustedes. Es acerca de nuestro vocabulario. Nuestro vocabulario en nuestras conversaciones diarias puede ser una bendición o una maldición. Les voy a explicar.
Proverbios 27:19 dice "…so el corazón refleja a la persona real". Tal como he mencionado anteriormente "dándoles todo lo que está en su corazón determina lo que dices". ¿(Mateo 12: 34), esta tu vocabulario reflejando el verdadero Tu?
James 3:10 dice "Y tan bendición y maldiciendo a venir a raudales de la boca de la misma. ¡Sin duda, mis hermanos y hermanas, esto no es correcto! ". Esto nos recuerda que no somos los únicos que se ven afectados por lo que decimos.
Aquí hay dos ejemplos de cómo las actitudes marcan la diferencia junto con tu vocabulario:
Leí en un libro sobre una mujer que tomaba el tren cada mañana para el trabajo con casi siempre los mismos viajeros. Los viajeros leen sus periódicos, escriben en sus ordenadores portátiles,(laptops) etc.. Nadie decía una palabra. Esta mujer decidió decir "¡Buenos días!" cada vez que entraba en el tren. Los viajeros la miraban a ella como si hubiera venido de otro planeta; ella recibía unos pocos "Buenos Días". Hasta que un día uno de los viajeros se mantuvo viendo lo que ella hacia todas las mañanas, le puso tan contento de recibir el "Buenos Días" de ella que, luego, el continuaba diciendo "Buenos Días" a todo el mundo que él conocía al tomar el tren.
Aun haciendo el cambio más pequeño en Tu vocabulario, Tu verás cuánto impacto hace a los demás! Si tienes un vocabulario positivo, te pido que lo extienda contagiosamente a los demás!
Yo estaba en el área de espera mientras que mi esposo estaba teniendo una cirugía del hombro. Una joven dama camina en la puerta por sí sola y obtiene su papeleo de registro. Su mamá viene en momentos más tarde con las muletas de su hija y las necesidades de los suministros después de su cirugía. La Mamá, con una actitud, dice "Me dejaste abajo sola?". La hija respondió con una actitud, "¡sí, te deje abajo sola!". Final de la conversación.
¡Trata a otros cómo deseas ser tratada! ¡Si deseas que otros te hablen como un Hijo del Rey de Reyes y Señor de Señores, entonces, debes hablarle a los demás de esa misma manera!
¿Estas Oyendo o escuchando lo que dices? Oír y escuchar son dos cosas diferentes: "Oír" significa a percibir el sonido; escuchar con atención. "Escuchar" significa escuchar algo con atención reflexiva. ¡Esto significa que "escuchar" toma más esfuerzo!
No deje a tus sentimientos dictar lo que vas a decir. Ser cuidadoso antes de hablar. James 1: 19 dice "…todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar…" Incluso puede morder la lengua si es necesario.
Colosenses 4: 6 dice "Que sea amable y atractivo para que tenga la respuesta correcta para todos de la conversación". ¡Proteger tu testimonio con su vocabulario!
Filipenses 2:14 dice que "Haced todo sin murmuraciones y contiendas,". ¿Usted? ¡Si es así, brillará brillantemente reflejando Jesús quien es la luz que vive en TI! ¡Si no es así, entonces Oro para que recibas esta palabra y la utilices en la conversación diaria!
¡Cambiar su vocabulario!
Cambio significa hacer diferentes o transformar, a cambio, intercambio o transferencia. ¡El cambio también toma esfuerzo! Cambiar las palabras de vocabulario negativo en el intercambio para positivas.
2 Corintios 12:9 dice: “Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad.” ¡Si su debilidad es el vocabulario que está utilizando actualmente, Déjalo en las manos de Dios en Fe y le permita que le muestre su gloria a través de su debilidad!
Recuerde siempre, “…De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.” (2 Corintios 5: 17)… ¡Esto significa que su vocabulario también está incluido en esta promesa de Dios!
Oración
Señor Jesús, gracias por siempre estar allí y saber exactamente qué área necesitamos moldura y crecimiento. Te pido que ayudes, no sólo a las mujeres que han leído este blog, pero también a mi misma incluida, a cambiar nuestro vocabulario. Sabemos que tomará tiempo para adaptarse a nuestro vocabulario nuevo, pero Te pedimos que nos ayudes en el proceso. ¡Te lo pedimos, en el nombre de Jesús! Amen.
Muchas bendiciones,
María Guzmán
María Guzmán
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